Políticas sociales y COVID-19 ¿Qué no ha hecho el Perú por las comunidades rurales? Hablando un poco sobre el Bono 600

Escrito por Olenka Ibarra, miembro de Máika

POLÍTICAS SOCIALES Y ECONÓMICAS A NIVEL MUNDIAL

Desde el año 2020, todas las personas se han enfrentado a un virus que ha abarcado todo el globo terráqueo. Cada rincón y lugar alrededor del mundo fue invadido por una pandemia sin precedentes y ningún lugar se ha salvado de encontrarse expuesto al virus SARS-CoV-2, mejor conocido como coronavirus o COVID-19. 

La emergencia sanitaria que atravesábamos era tanta que muchos líderes mundiales empezaron a tomar medidas extremas pero necesarias para cuidar a sus ciudadanos. Entre las más utilizadas se encontraba el toque de queda, cuidado e información de la higiene y restricción de salidas a nivel total. Sin embargo, para muchas personas, el no salir implicaba no realizar actividades laborales y, por tanto, no percibir un ingreso para solventarse económicamente.  

En ese sentido, naciones como Australia, brindaron un subsidio que benefició a más de 3.5 millones de trabajadores cuando el COVID se encontraba en su punto más álgido [1]. En Francia, su plan de subsidio tuvo un enfoque social-económico que incluyó la entrega inmediata de recursos a trabajadores y en Alemania se concretaron facilidades económicas a las empresas pequeñas, medianas y grandes, así como el aplazamiento del pago de impuestos [2]. 

¿Y EL PERÚ? 

Mediante el Decreto Supremo N° 044-2020- PCM, publicado en el Diario Oficial El Peruano el 15 de marzo de 2020, se declaró el Estado de Emergencia Nacional por las graves circunstancias que afectan la vida de la nación a consecuencia del brote COVID-19, plazo que fue ampliado considerablemente hasta la actualidad por medio del Decreto Supremo N° 008-2021-PCM, puesto que el Perú es uno de los países en América Latina más afectado por el virus a nivel sanitario y económico. 

A raíz de la declaración del estado de emergencia nacional, se llegaron a legislar medidas para solventar el cuidado económico de la población. Una de estas medidas extraordinarias adoptadas por el Poder Ejecutivo fue la entrega de bonos universales para hogares contenidos en los siguientes dispositivos legales: 

Bono/subsidio

Objetivo

Bonos a hogares en condiciones de pobreza y pobreza extrema “Bono Quédate en casa”

(DU N° 027 – 2020 y DU N° 036 – 2020)

Bono de S/ 760 soles, pagados en dos armadas. Dirigido a hogares en condiciones de pobreza y pobreza extrema.

Bono a hogares de trabajadores/as independiente

(DU N° 033 – 2020)

Bono de S/ 760 soles, pagados en dos armadas. Dirigido a hogares considerados No pobres, pero con trabajadores independientes en su constitución.

Bono para hogares en condición de pobreza y pobreza extrema en el ámbito rural

(DU N° 042 – 2020)

Bono de S/ 760 soles, pagados en dos armadas. Dirigido a hogares en condiciones de pobreza y pobreza extrema en el ámbito rural

Bono Familiar Universal I 

(D U N° 052-2020)

Dirigido a los hogares vulnerables que aún no han sido beneficiados con los demás bonos otorgados por el Estado

Bono Familiar Universal II 

(D U N° 098-2020) 

Aquellos hogares en condición de pobreza y pobreza extrema de acuerdo con el Sistema de Focalización de Hogares 

Lamentablemente, a pesar del apoyo que mostraba el gobierno, lo inevitable sucedió. Muchas de las personas que eran beneficiarias de los bonos no llegaron a recibirlo por múltiples razones. Una de ellas y la más importante fue que el padrón utilizado por el gobierno fue del año 2017. Centenares de personas quedaron sin un subsidio capaz de auxiliar sus necesidades más básicas, ya que la brecha de temporalidad enmarcaba una diferencia de 3 años de datos no recolectados. Por otro lado, algo que debe traer la atención a nuestros ojos fue la despreocupación y falta de urgencia del gobierno hacia grupos vulnerables como las comunidades rurales [3]. 

COMUNIDADES RURALES ¿INDIFERENCIA O DESCUIDO DEL ESTADO?

De acuerdo a la Resolución Ministerial N° 308-2020-MINSA, el Ministerio de Salud creó un plan de intervención para comunidades indígenas y centros rurales de la Amazonía frente a la emergencia del COVID-19. Se concretó un análisis situacional de estos sectores y se brindó un presupuesto para fortalecer las medidas de prevención y mejorar la capacidad de respuesta sanitaria frente al virus. Empero, el plan concebido por el MINSA, en líneas generales, no fue inservible, pero si ineficaz [4]. 

En relación al apartado anterior, los Servicios de Comunicación Intercultural – SERVINDI menciona que el Estado se encuentra familiarizado y preparado para satisfacer las necesidades de lugares metrópoli, más no a espacios rurales como los de la sierra – selva peruana. Asimismo, los órganos gubernamentales encargados de realizar políticas en favor de las comunidades rurales no ostentan de la información necesaria ni actualizada para el desarrollo y protección de estas personas. Un ejemplo de ello es el Servicio Nacional de Áreas Protegidas por el Estado – SERNARP que despliega sus actividades sobre áreas rurales con presencia indígena y que, lamentablemente, no cuenta con un diseño institucional ni personal capacitado para el trabajo con estos pueblos, por tanto, ejecutar proyectos que conlleven el trato con estas comunidades se ha vuelto cada vez más complicado [5]. 

Es innegable decir que quienes han tenido las horas más oscuras por esta pandemia han sido las comunidades rurales. El Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control del Ministerio de Salud reveló que en el año 2020 existieron más de 21 mil casos de indígenas afectados donde Loreto fue la región más golpeada, seguida por Ucayali y Amazonas. Desafortunadamente, tampoco se cuenta con un registro de indígenas fallecidos por el COVID-19. Hasta el año 2020 se tenía un número de 384 indígenas muertos por coronavirus en la Amazonía, sin embargo, en la actualidad se desconoce el número de muertes y su ascenso [6].

En otras palabras, la falta de información demográfica y de individuos ha sido una desventaja para la búsqueda de soluciones respecto de las comunidades rurales y COVID-19, pero, ¿hubiese sido posible prever estos obstáculos y habernos preparado antes de la tempestad? Por supuesto. El Grupo de Análisis para el Desarrollo señala que Perú es uno de los países que, en los últimos 15 años, ha vivido un crecimiento exorbitante en relación a su economía desde el 2004 al 2012, no obstante, luego de ese periodo, desaceleró el desarrollo y hasta el día de hoy le está costando volver a una afluencia económica que le permita tener resultados positivos [7]. 

Parte de esta información se desprende de la falta de inversión y preocupación en las comunidades rurales, donde una persona tiene tres veces más probabilidades de ser pobre cuando nace en el campo que en la ciudad. Este es el primer eslabón que muchos gobiernos han tratado de batallar y no han podido vencer: la pobreza. Esta se muestra como un factor interrelacionado con otros componentes, como el transporte, conectividad, falta de acceso a servicios de salud, agua, infraestructura y saneamiento [7]. 

En atención a ello, la relación está clara. La falta de políticas enfocadas en las comunidades rurales fueron un impedimento para que las actuaciones por parte del Estado para combatir el COVID-19 fueran exitosas. Es complejo solicitar que estas agrupaciones puedan protegerse cuando no tienen centros de salud especializados para tratar este virus y, además de eso, pedir que los centros sanitarios que se mantienen a flote puedan luchar con medicamentos para calmar dolores o afecciones básicas, pero no procedimientos o tratamientos complicados como lo es el COVID-19. 

SUBSIDIOS EN EL ÁMBITO RURAL 

Tomando en consideración todo lo mencionado hasta aquí, es momento de analizar lo siguiente ¿el bono rural fue una idea estructurada para las comunidades rurales o solo un duplicado de las leyes aplicadas en la capital limeña? El único bono que fue enfocado para las comunidades rurales en pobreza y pobreza extrema fue lanzado por medio del Decreto de Urgencia N° 042-2020, en el cual se decretaron medidas que coadyuven en la economía de los hogares en ámbitos rurales con un monto básico de S/ 760 soles, es decir, menos de una remuneración mínima vital. Aun así, este sería cobrado por medio del Banco de la Nación y otras entidades financieras privadas del país. 

Ahora bien ¿cuántas personas de comunidades rurales tienen dentro de su jurisdicción un Banco de la Nación o una entidad financiera para realizar actividades monetarias básicas? Muchas de las personas que viven en estas comunidades viven a kilómetros de distancia de lugares con acceso a estos centros financieros e incluso pueden demorar días en llegar para obtener el dinero prometido por el Estado, pero con la incertidumbre de no ser un beneficiado o beneficiada debido a la falta de actualización de datos de las personas en localidades rurales. 

BONO 600, UN PALIATIVO MÁS NO UNA SOLUCIÓN 

El 30 de enero del presente año se emitió el Decreto de Urgencia N° 010-2021, Decreto que otorga facilidades económicas adicionales para enfrentar el COVID-19. En este caso, se dotará de un subsidio de S/ 600 soles a favor de hogares en condición de pobreza y pobreza extrema, adicionalmente, se contará con los tambos o plataformas fijas del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS) para llegar a las zonas rurales del país [8]. 

La iniciativa por parte del Poder Ejecutivo no es errónea, realmente ciertas comunidades necesitan un apoyo más intenso y enfocado en su cuidado y protección, pero es importante resaltar que seguiremos en un círculo vicioso si es que no observamos la verdadera situación en vista panorámica: no todas las personas serán beneficiarias del bono, en consecuencia, no todas podrán acceder al dinero para afrontar dificultades económicas; además, si no se obtiene el dinero tampoco se podrá adquirir medicamentos para el tratamiento de alguna enfermedad o virus. Tampoco hay confianza en los centros de salud, porque el Estado no se ha enfocado durante décadas en dotar a los hospitales con profesionales capacitados y herramientas necesarias para que las personas puedan ser tratadas y curadas. 

 A MODO DE CONCLUSIÓN 

El Perú es un país con una política descentralizada, muchas de las acciones intersectoriales formuladas por el gobierno deben concretarse para todas las personas en este territorio. No obstante, el propósito del gobierno no puede hacerse realidad hasta que diferentes grupos vulnerables puedan tener el mismo acceso a servicios básicos que mejoren su calidad de vida. Las comunidades rurales se han encontrado olvidadas e invisibilizadas durante mucho tiempo, esta pandemia ha dado a relucir las brechas sociales, económicas y culturales que hemos dejado de lado por pensar que la capital es el Perú entero. 

Imagen: Andina

Bibliografía 

[1] Deutsche Welle (2020). Australia extiende subsidios a trabajadores por COVID-19. https://www.dw.com/es/australia-extiende-subsidios-a-trabajadores-por-covid-19/a-54250710

[2] BBC News Mundo. (2020). Coronavirus: qué están haciendo las grandes economías para evitar la bancarrota de las empresas y la escasez de dinero (y hasta dónde pueden llegar). https://www.bbc.com/mundo/noticias-51955484

[3] Carrillo, M. S. (2018). INEI difunde Base de Datos de los Censos Nacionales 2017 y el Perfil Sociodemográfico del Perú. Instituto Nacional de Estadística e Informática. http://censo2017.inei.gob.pe/inei-difunde-base-de-datos-de-los-censos-nacionales-2017-y-el-perfil-sociodemografico-del-peru/

[4] Resolución N° 308-2020-MINSA. Plan de Intervención del Ministerio de Salud para comunidades indígenas y centros poblados de la Amazonía peruana frente a la emergencia del COVID-19 RM_308-2020-MINSA.PDF (www.gob.pe) 

[5] COVID, políticas públicas y pueblos indígenas (2020).  Servindi – Servicios de Comunicación Intercultural.https://www.servindi.org/20/04/2020/covid-politicas-publicas-y-pueblos-indigenas

[6] Covid-19 en la Amazonía: Awajún y Kichwa son los pueblos indígenas más afectados. (2020). Ojo Público. https://ojo-publico.com/2020/awajun-y-kichwa-son-los-pueblos-indigenas-mas-afectados-por-covid-19

[7] La pobreza rural se agrava en Perú y América Latina | GRADE. (2019). Grupo de Análisis para el Desarrollo. http://www.grade.org.pe/novedades/la-pobreza-rural-se-agrava-en-peru-y-america-latina/

[8] Canales de orientación sobre el Bono 600. (2021). Gobierno del Perú. https://www.gob.pe/12553-canales-de-orientacion-sobre-el-bono-600

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