Seguridad hídrica y la Conferencia de la ONU sobre el Agua 2023

Escrito por Nadia Blas, Valeria Delgado y Silvana Dominguez, miembros del Consejo Editorial de Conexión Ambiental.

I. Introducción

A raíz de la Conferencia sobre el Agua, la cual tuvo su inauguración el pasado 22 de marzo,  se focalizó la atención en lo que debería ser la preservación del agua, y el compromiso de las partes de cuidar a futuro este recurso natural tan importante. Sin embargo, para comprender el tópico de esta Conferencia que reúne y preocupa a los países año tras año es relevante remontarse a la situación actual. Para comenzar, es una realidad que muchas personas de diferentes partes del mundo no poseen acceso al agua potable ni sistemas de saneamiento en sus localidades. Incluso, en las zonas más rurales, si desean acceder a este recurso deben realizar largas jornadas de recorrido para reunir una cantidad suficiente que abastezca a sus hogares. O sin llegar tan lejos, en la periferia de las ciudades metropolitanas se ven, debido a la nula planificación urbana, muchos hogares sin acceso al agua ni servicios de saneamiento. Desafortunadamente, gran parte de estos problemas se deben a su ubicación demográfica, una estancia estratégica para las personas con bajo ingreso per cápita que al ser de bajo o costo cero promueve la vivencia en estas zonas. Sin embargo, esta situación simboliza realmente una precarización de la calidad de vida de las personas y una poca protección a lo que serían sus derechos tutelados por el Estado.  

El Estado peruano, en materia de normativa internacional, ha suscrito diversos tratados ambientales, dentro de los cuales se encuentran los que son en temas de seguridad hídrica. De la misma forma, como parte ya de normativa nacional, estos tratados se han traducido en leyes expresas de seguridad de los recursos hídricos, los cuales reconocen al agua como recurso natural renovable que es de carácter indispensable para vivir. Asimismo, la propia Constitución del Perú reconoce, en su artículo 7 apartado A, el “derecho de toda persona acceder de forma progresiva y universal al agua potable (…)”. Es decir, no se puede obviar su necesidad ni olvidar su prioridad de implementación dentro de regiones que no la poseen. Es así que el presente artículo busca abordar más de cerca los detalles de la Conferencia sobre el Agua 2023, la relevancia del agua como garantía de derechos humanos, la expectativa de adopción de la Agenda, la realidad de contaminación y desaparición de recursos hídricos que azota al país, para finalmente culminar con la definición de seguridad hídrica en el contexto actual.

II. ¿Qué es la Conferencia sobre el Agua de la ONU? ¿Desde cuándo se celebra?

En primer lugar, resulta necesario precisar el foco central de la Conferencia sobre el Agua (en adelante, “la Conferencia”) para abordar con mayor detalle en qué consiste. El objetivo central de la Conferencia es profundizar en los desafíos actuales relacionados con el agua y promover la preservación y conservación sostenible del agua mediante la promoción de una gestión eficiente de este recurso. El agua, como recurso fundamental e ineludible para la subsistencia humana, garantiza no solo derechos primordiales como el derecho a la vida, la salud o el acceso a un ambiente sostenible, sino que también se configura como un elemento indispensable para la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, debido a su estrecha relación con el clima, la generación de energías más sustentables, la habitabilidad de las urbes, el medio ambiente, la salud, entre otros aspectos [1]. 

Es por esta razón que se asegura que el agua va más allá de ser una necesidad, sino que trasciende a ser una cuestión de derechos. La ONU, como organismo que protege a los derechos humanos a nivel mundial, ha estudiado la creciente crisis mundial de abastecimiento de agua y la cada vez mayor demanda de este recurso tanto para satisfacer necesidades humanas como para su uso en el comercio y la agricultura que sostienen parte de la economía circundante. Por lo tanto, la falta de acceso a fuentes de agua potable obstruye la garantización de los derechos a la vida, la salud y el bienestar, pues el agua potable es una herramienta funcional y necesaria para la higiene personal, la preparación de alimentos como de la prevención de enfermedades. Es por ello que la ONU ha organizado distintas conferencias y conversatorios para que diversos sujetos interesados en el tema a nivel estatal y no estatal puedan participar y conocer los procedimientos que se pretenden impulsar para hacer frente a la presente crisis del agua. 

Entre las conferencias llevadas a cabo por la ONU sobre el agua se encuentra la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua [2], que se celebró por primera vez en el año 1977 en la ciudad argentina de Mar del Plata. Cabe destacar que la UNESCO fue quien celebró este encuentro en primera instancia, el cual contó con la presencia de especialistas y líderes en el área del agua y saneamiento. Dado que se trataba de un pleno recientemente constituido, se contó con dos temas transversales que fueron la gestión del agua y el saneamiento.

La Conferencia es un evento celebrado cada tres años que reúne a representantes gubernamentales de los miembros partes de la ONU, organismos internacionales, organizaciones de la sociedad civil, académicos, expertos en materia hídrica, sector privado, organismos no gubernamentales (ONG), entre otros, para debatir aspectos en conflicto que requieren de una actuación inmediata para la preservación y conservación sostenible del agua. 

De este modo, el propósito de la Conferencia es discutir los desafíos mundiales vinculados con el agua, tales como la contaminación hídrica, la gestión de recursos hídricos, el libre acceso a fuentes de agua potable y la desaparición de recursos hídricos. Asimismo, se centra en difundir una cultura de cuidado hacia los distintos recursos hídricos que existen en los territorios de cada Estado miembro e invita a la integración y al intercambio de conocimientos para mejorar las prácticas administrativas que sirven para la preservación y conservación del agua. 

III. ¿Cuáles fueron los puntos a tratar durante la celebración de la Conferencia sobre el Agua 2023 de la ONU?

La Conferencia tuvo como objetivo principal sensibilizar a la población acerca de la importancia de actuar frente a la creciente crisis del agua, así como la implementación de políticas públicas que movilicen a los diferentes sectores, países y actores para la resolución de esta preocupante problemática. Entre los puntos más destacables se encontró [3]:

  1. Evaluar los avances logrados en relación con los objetivos establecidos para la década, así como la reafirmación de los objetivos y metas relacionados con el agua acordados internacionalmente. 
  2. Reconocer la importancia de abordar desafíos y oportunidades para respaldar la implementación y aceleración del acceso equitativo al agua potable, tanto a nivel local, nacional como internacional. También, en lo referente a la gestión adecuada y funcional de recursos hídricos y en la creación de un enfoque preventivo que enfrente los desafíos futuros del agua. 
  3. Cooperar con el Foro Político de Alto Nivel sobre Desarrollo Sostenible (HLPF), proponiendo al agua como factor de conexión entre los Objetivos de Desarrollo Sostenible. 
  4. Contribuir en el intercambio de iniciativas y prácticas como en la promoción de una cooperación para la sostenibilidad de enfoques colaborativos basados en la ciencia y tecnología.
  5. Incentivar a los Estados y otros interesados a presentar iniciativas, acuerdos y ejecutar acciones concretas, mediante la asunción de compromisos voluntarios que respalden una agenda de acción para transformar la manera en cómo las sociedades usan, visualizan y asignan el agua. 

Entonces, se puede concluir que durante la Conferencia se discuten temas relacionados estrechamente con el agua. Temas como la gestión de recursos hídricos, el acceso al agua potable y su abastecimiento, entre otros. Además, la fomentación de una colaboración entre los Estados miembros, la sociedad civil y el sector privado para impulsar iniciativas y acciones que logren garantizar el derecho al agua y el saneamiento.

IV. ¿Cuáles son los acuerdos que se fijaron durante la celebración de la Conferencia sobre el Agua 2023 de la ONU?

Es menester destacar que en la Conferencia no solo se discutieron temas vinculados con el agua, sino que también se adoptaron diversos acuerdos por países de nuestra región. A nivel latinoamericano [4], países como Colombia, México y Ecuador asumieron, junto a un grupo de países africanos, el compromiso de restaurar 300, 000 kilómetros de ríos y 350 millones de hectáreas de humedales. Es más, el gobierno ecuatoriano pudo exponer su plan nacional estimado en 65 millones de dólares para la creación de 21 áreas protegidas hídricas. Asimismo, otro de los compromisos [4] que más relevancia tuvo fue el de reducir la contaminación hídrica, proteger ecosistemas marítimos o que dependan enteramente del agua, y fortalecer la participación de comunidades locales en el manejo hídrico. Esto último, sobre todo, en cumplimiento con el punto 6 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. 

Asimismo, se resalta la implementación de acuerdos no vinculantes [4] como el compromiso resultante de Estados Unidos de aportar 49 mil millones de dólares para la inversión en servicios de infraestructura de saneamiento y aguas resilientes al cambio climático. Además, países asiáticos como Japón, proveerán más 3 mil millones dólares para programas de desarrollo de infraestructura en Asia-Pacífico. Es pertinente señalar que estos acuerdos no tienen impacto legal obligatorio debido a su carácter no vinculante.

A pesar de los avances en la gestión del agua en Latinoamérica, aún existen desafíos por enfrentar. Hoy en día, nuestra región se ve severamente golpeada por la desaparición de fuentes hídricas en zonas como Colombia, la contaminación de ríos y lagos a causas de la minería ilegal y la falta de abastecimiento de agua potable en áreas rurales y urbanas pobres. Como consecuencia, la falta de acceso al agua potable impacta en la salud, la seguridad alimentaria y el bienestar de las personas, y repercute negativamente en la garantía de los derechos a un ambiente sano y el derecho a un ambiente sostenible.

V. El agua como garantía de los derechos humanos frente al contexto de la crisis climática

El acceso al agua potable es necesario para garantizar el ejercicio del derecho a la igualdad, especialmente dentro del marco de la creciente crisis climática y la búsqueda de un desarrollo sostenible. El agua es un recurso indispensable para satisfacer necesidades básicas como la alimentación, la higiene y la salud, y su disponibilidad y calidad son esenciales para asegurar una vida digna para todas las personas.

Por tal razón, en la Conferencia se centraron en discutir y adoptar medidas para la gestión sostenible del agua en la región. Una gestión sostenible del agua es esencial para garantizar el acceso equitativo y justo al agua potable y el saneamiento, que son derechos fundamentales de todas las personas. Es por ello que el acceso a servicios de agua potable debe ser considerado un derecho humano fundamental. Esto implica que el Estado tiene la obligación de asegurar el acceso a este recurso a toda la población, en especial a las comunidades más vulnerables y marginadas. También, debe fomentar una gestión responsable y sostenible del agua, que permita su conservación y protección a largo plazo.

Además, tanto la crisis climática [5] que afecta el funcionamiento de los ecosistemas de agua dulce al alterar los flujos fluviales, y los desafíos ambientales que enfrenta la región de Latinoamérica, tales como la deforestación, la contaminación de los ríos y la desertificación, tienen un impacto directo en la disponibilidad y calidad del agua. Por lo tanto, la gestión sostenible del agua es crucial para abordar estos problemas y garantizar un acceso justo y equitativo al agua para todos, lo que es fundamental para el ejercicio del derecho a la igualdad y a un ambiente sostenible. Por lo tanto, es responsabilidad de los gobiernos y la sociedad en general trabajar juntos para garantizar una gestión sostenible del agua en la región, para proteger este recurso valioso y garantizar que esté disponible para las generaciones futuras.

VI. Expectativa por la adopción de la Agenda de Acción por el Agua

Las dos semanas de la Conferencia sobre el Agua dio como resultado a la “Agenda de Acción para el Agua”, un plan en el cual los países han establecido 689 compromisos y prometido destinar 300.000 millones de dólares para su cumplimiento [6]. 

Los compromisos adoptados comprenden una amplia gama de sectores relacionados al recurso hídrico. Entre ellas se encuentran acciones que varían “desde la creación de capacidades hasta los sistemas de datos y seguimiento, pasando por la mejora de la resiliencia de las infraestructuras”, como señaló Li Junhua, Secretario General Adjunto de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU [7].

La ONU ha incentivado la propuesta de compromisos, incluso antes de iniciar la Conferencia sobre el Agua del mes pasado, y ha instado a todos los sectores, industrias, profesionales e interesados a participar en su elaboración y réplica en los próximos años. A la fecha de publicación, el artículo de la ONU ha recibido 734 compromisos de organizaciones y países alrededor del mundo [8]. Tales compromisos buscan contribuir al progreso de las metas en la segunda mitad de la Década de Acción por el Agua 2018-2028 y la segunda mitad de la Agenda 2030.

Si bien la Agenda no es un documento vinculante para los países, es decir, no es de obligatorio cumplimiento, adquiere un rol importante para impulsar la toma de acciones en la materia.

VII. Contaminación hídrica y desaparición de recursos hídricos

Sobre las causas y consecuencias de la contaminación hídrica 

Los lagos, ríos y mares se han vuelto depósitos de diversos tipos de residuos. El ya difícil acceso para millones de personas a recursos hídricos se ha visto agravado por la contaminación y destrucción de la fuente de este recurso.

Una de las causas de la contaminación del agua es el mal manejo de los vertidos industriales. Esto es, aquellos desperdicios de fábricas que, o son desechados ilegalmente o no siguen la normativa ambiental correspondiente para su correcta disposición. De igual manera, las fuentes hídricas también pueden ser contaminadas por desperdicios dejados a una distancia cercana, pues la lluvia o la nieve derretida puede transportar agentes contaminantes hasta el agua [9]. La misma lógica siguen las aguas fecales, que son desechadas y no se tratan hasta llegar a los mares y océanos. Otra causa de la contaminación hídrica es la deforestación. Debido a que la tala masiva de árboles genera la dispersión de sedimentos que terminan en las diversas fuentes de agua transportadas por los ríos [10].

Ahora bien, las consecuencias de la contaminación del agua pueden dividirse en tres secciones: (i) salud humana, (ii) contaminación de fauna y (iii) daño en los ecosistemas [9]. No hace falta decir que el consumo de agua insalubre representa un grave peligro para la salud del ser humano, dependiendo de los componentes y la cantidad que se encuentre en el recurso hídrico tendrá un mayor o menor impacto a largo o corto plazo en las personas. Puesto que el ser humano no es la única especie que consume agua, naturalmente los animales que recurren al recurso contaminado también sufren problemas de salud. 

Finalmente, como el agua es un elemento esencial para la subsistencia de los ecosistemas, su deterioro implica también un deterioro general de la biodiversidad que depende de esta. Cabe recordar que si bien el planeta está cubierto principalmente por agua, solo el 2,5% es agua potable, por lo que la contaminación de sus fuentes reduce aún más su disponibilidad.

¿Cómo funciona la ODS 6 en la prevención de la contaminación hídrica y la desaparición de recursos hídricos?

Con el fin de erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar la prosperidad para todos como parte de una nueva agenda de desarrollo sostenible, en el 2015 la Asamblea General de las Naciones Unidas estableció los Objetivos de Desarrollo Sostenible u Objetivos Globales (ODS) [11]. Tales objetivos consisten en 17 ODS con la expectativa de cumplirlos para el 2030.

El ODS 6 consiste en Agua limpia y saneamiento y una de sus metas es:

De aquí a 2030, mejorar la calidad del agua reduciendo la contaminación, eliminando el vertimiento y minimizando la emisión de productos químicos y materiales peligrosos, reduciendo a la mitad el porcentaje de aguas residuales sin tratar y aumentando considerablemente el reciclado y la reutilización sin riesgos a nivel mundial.”[12] 

Como se puede apreciar, el ODS 6 no solo busca garantizar el acceso y disponibilidad de agua alrededor del mundo, sino que también ha reconocido el problema que es la contaminación de este recurso. Por ello, el ODS 6 también busca incentivar la gestión sostenible de recursos hídricos, evitar su contaminación e implementar mecanismos de tratamiento para recuperar los recursos hídricos ya usados.

Asimismo, otra meta planteada por el ODS 6 es:

De aquí a 2020, proteger y restablecer los ecosistemas relacionados con el agua, incluidos los bosques, las montañas, los humedales, los ríos, los acuíferos y los lagos.”[12]

Sin embargo, al día de hoy, incluso pasada la fecha esperada para el cumplimiento de la meta, la tarea de protección y recuperación de ecosistemas hídricos sigue siendo difícil y cada año continúa su deterioro alrededor del mundo.

VIII. Seguridad hídrica como un mecanismo eficiente y funcional para dar frente a la problemática actual sobre el agua

¿Qué es la seguridad hídrica?

“La seguridad hídrica se define como la capacidad de una población para salvaguardar un acceso sostenible a cantidades adecuadas de agua de calidad aceptable para sostener los medios de vida, el bienestar humano y el desarrollo socioeconómico, para asegurar la protección contra enfermedades y desastres relacionados con el agua, y para preservar los ecosistemas en un clima de paz y estabilidad política” [13] Por otro lado, Sadoff y Muller definen a la seguridad hídrica como “la provisión confiable de agua cuantitativa y cualitativamente aceptable para la salud, la producción de bienes y servicios y los medios de subsistencia, junto con un nivel aceptable de riesgos relacionados con el agua” [14]

¿Cómo se garantiza o fomenta la seguridad hídrica? 

Según la Ley de Recursos Hídricos de nuestro país (2009) “El agua es un recurso natural renovable, indispensable para la vida, vulnerable y estratégico para el desarrollo sostenible, el mantenimiento de los sistemas y ciclos naturales que la sustentan, y la seguridad de la Nación” [15].

En la Política de Estado sobre los Recursos Hídricos (2012) el Estado se compromete a “[…] Cuidar el agua como patrimonio de la Nación y como derecho fundamental de la persona humana al acceso al agua potable, imprescindible para la vida y el desarrollo humano de las actuales y futuras generaciones. Se debe usar el agua en armonía con el bien común, como un recurso natural renovable y vulnerable, e integrando valores sociales, culturales, económicos, políticos y ambientales” [16]. Para esto, entre otras medidas, el Estado dará prioridad al abastecimiento de agua en cantidad y calidad adecuadas para el consumo humano y la seguridad alimentaria; y asegurará el acceso universal al agua potable y saneamiento a todas las poblaciones urbanas y rurales.

El Perú está adherido a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas (2015) [17], cuyo ODS seis es el de garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos. La Ley N° 30588 (2017) incorpora el artículo 7-A a la Constitución Política del Perú que establece que “el Estado reconoce el derecho de toda persona a acceder de forma progresiva y universal al agua potable. El Estado garantiza este derecho priorizando el consumo humano sobre otros usos” [18].

IX. Conclusiones

Tras la exposición y análisis de los temas abordados en la conferencia sobre la gestión sostenible del agua, es evidente la relevancia de ubicar el acceso al agua potable como un derecho humano fundamental y como garantía para la igualdad y el desarrollo sostenible. La discusión sobre la contaminación hídrica y la seguridad hídrica denota la necesidad de una gestión responsable y sostenible del agua, que permita su conservación y protección a largo plazo, y aborda los desafíos ambientales y climáticos que enfrenta la región.

El cambio climático y la desaparición de fuentes hídricas, por su parte, plantean desafíos significativos para la gestión sostenible del agua y la garantía de acceso equitativo y justo al recurso. Por lo tanto, resulta ser responsabilidad de los gobiernos y la sociedad en general trabajar juntos para proteger y conservar este valioso recurso y garantizar su disponibilidad para las generaciones futuras.

Para concluir, debemos tomar en cuenta que la gestión sostenible del agua es un tema crucial para el desarrollo sostenible y la garantía de derechos humanos fundamentales en la región. La conferencia ha permitido un espacio de diálogo y reflexión sobre los desafíos y soluciones posibles para una gestión responsable y sostenible del agua, y hace un llamado a la acción a los gobiernos y la sociedad en general para garantizar un acceso equitativo y justo al agua para todos.

 

Referencias 

[1] Acerca de la Conferencia | Department of Economic and Social Affairs. (s. f.). Naciones Unidas. Recuperado 14 de abril de 2023, de https://sdgs.un.org/es/conferences/water2023/about 

[2] United Nations. (s. f.). Agua | Naciones Unidas. Recuperado 15 de abril de 2023, de https://www.un.org/es/global-issues/water 

[3] Hacia la Conferencia sobre el agua de la ONU 2023. (2023, 27 febrero). IUCN. Recuperado 15 de abril de 2023, de https://www.iucn.org/es/articulo/202302/hacia-la-conferencia-sobre-el-agua-de-la-onu-2023 

[4] Tarazona, D. (2023, 5 abril). Latinoamérica en la Conferencia del agua de la ONU: ¿Qué promesas asumieron los países y qué temas quedaron pendientes? Noticias ambientales. https://es.mongabay.com/2023/04/conferencia-del-agua-de-la-onu-latinoamerica/ 

[5] ONU. (2019). Informe de políticas de ONU-AGUA sobre el Cambio Climático y el Agua. En UN water. Recuperado 14 de abril de 2023, de https://www.unwater.org/sites/default/files/app/uploads/2019/12/UN-Water_PolicyBrief_Water_Climate-Change_ES.pdf 

[6] Revista Técnica de Medio Ambiente. (2023, 31 de marzo). 689 compromisos y 300.000 millones de dólares para impulsar la Agenda de Acción del Agua. https://www.retema.es/actualidad/689-compromisos-y-300000-millones-de-dolares-para-impulsar-la-agenda-de-accion-del-agua#:~:text=Inicio-,689%20compromisos%20y%20300.000%20millones%20de%20d%C3%B3lares%20para%20impulsar%20la,agua%20para%20acelerar%20el%20progreso

[7] Naciones Unidas. (2023, 24 de marzo). Conferencia sobre el agua: 689 compromisos para no que no pasemos sed. https://news.un.org/es/story/2023/03/1519677 

[8] Naciones Unidas. (s/f). Water Action Agenda.  https://sdgs.un.org/partnerships/action-networks/water 

[9] Nunez, C. (2023, 06 de marzo). La contaminación del agua constituye una crisis mundial creciente. Esto es lo que hay que saber. En National Geographic. https://www.nationalgeographic.es/medio-ambiente/contaminacion-del-agua 

[10] Aquae Fundación. (2021, 22 de agosto). Principales causas y consecuencias de la contaminación en el agua. https://www.fundacionaquae.org/agua-y-contaminacion/ 

[11] Naciones Unidas. (s/f). Objetivos de Desarrollo Sostenible. https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/objetivos-de-desarrollo-sostenible/ 

[12] Naciones Unidas. (s/f). Objetivo 6: Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos. https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/water-and-sanitation/ 

[13] World Water Assessment Programme. (2003). Agua para todos, agua para la vida. Informe de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos en el Mundo. Resumen Ejecutivo Paris: UNESCO. 

[14] Sadoff, C, Muller, M. (2010).  La gestión del agua, la seguridad hídrica y la adaptación al cambio climático: efectos anticipados y respuestas esenciales. Estocolmo: Global Water Partnership. TEC Background Papers, 14.

[15] Congreso de la República del Perú. (2009, 30 de marzo). Ley de Recursos Hídricos. Ley No. 29338. El Peruano. Normas Legales. XXVI(10562):393473-86.

[16] Acuerdo Nacional. Trigésima Tercera Política de Estado. (2012). Política de Estado sobre los Recursos Hídricos. Lima. 

[17] Naciones Unidas. (2017). Objetivos de desarrollo sostenible; 17 objetivos para transformar nuestro mundo. Objetivo 6: Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos. Nueva York. http://www.un.org/sustainabledevelopment/es/water-and-sanitation/ 

[18] Congreso de la República del Perú. Ley N° 30588 (2017). Ley de reforma constitucional que reconoce el derecho de acceso al agua como derecho constitucional, El Peruano. Normas Legales. 2017; XXXIV (14117): 4.

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