En el marco de la Semana de la Educación Ambiental, Martha Inés Aldana Durán, magíster en Derecho Ambiental Internacional y Comparado por la American University (Washington D.C.) y abogada por la Universidad de Lima, nos comparte una reflexión acerca de su experiencia como docente de Derecho Ambiental en, precisamente, espacios externos al Derecho.
Desde el año 2015 vengo asumiendo la gran oportunidad de enseñar el curso “Derecho y Medio Ambiente” en la Facultad de Letras y Ciencias Humanas de la PUCP, Especialidad de Geografía y Medio Ambiente.
Digo una gran oportunidad porque es un privilegio único poder contar con un grupo humano, un grupo de jóvenes, durante un período largo de tiempo (un ciclo académico). La PUCP me ha permitido, por primera vez, gozar de esta experiencia ya que por años venía dictando clases y charlas, pero nunca antes lo había hecho como profesora de un curso regular.
La enseñanza para mí es una forma de sentirme útil para la sociedad, buscando llegar a los (las) alumnos(as) para que adquieran herramientas que puedan aplicar en su vida profesional y, a la vez, ayudarles en el desarrollo de sus investigaciones académicas. De hecho, también, he venido buscando, durante el desarrollo de las clases que los(as) alumnos(as) se proyecten en lo que se puede venir en un futuro cercano como sería una entrevista de trabajo (que ha sido el examen final en los dos últimos años) con el objeto de lograr una experiencia de la vida real desde las aulas universitarias.
En el diseño del curso, mi objetivo consiste en que los(las) alumnos(as) conozcan y apliquen los conceptos, instituciones y mecanismos que brinda esta rama del derecho, tomando en consideración su evolución en el tiempo y su desarrollo actual.
Una pregunta que nos hacemos a lo largo del desarrollo del curso es: el ¿por qué? o, el ¿para qué? de las cosas. La idea es despertar en ellos (ellas) la inquietud de descubrir la esencia o la naturaleza de cada una de las instituciones del derecho ambiental, lo cual va más allá de la lectura de las normas vigentes, y está encaminado a establecer las bases conceptuales del derecho ambiental aplicado a la realidad.
En el desarrollo del curso abordamos el conjunto de temas que les permite adoptar las herramientas necesarias para aplicar el derecho ambiental lo cual comprende, entre otras cosas, las reglas básicas del derecho, las principales tendencias en el contexto internacional ambiental, la normativa ambiental general y la normativa ambiental transectorial así como los instrumentos de gestión ambiental; para, con esta base, conocer la legislación ambiental sectorial así como aquélla relacionada al aprovechamiento sostenible de los recursos naturales y, por último, la fiscalización ambiental.
Dado que he tenido la experiencia personal de trabajar en temas de derecho ambiental desde el año 1990, principalmente en el ámbito de la gestión pública ambiental, a través de la enseñanza busco enlazar cada clase con lo vivido y aprendido. La idea es motivar a los(las) futuros profesionales para conocer la aplicación práctica que la normativa ambiental viene teniendo, con sus dificultades y desafíos. A su vez, abordamos casos prácticos y presentamos los procesos de mejora normativa que vienen siendo desarrollados.
Una parte esencial en el desarrollo del curso es buscar que cada uno(una) se forme una opinión propia sobre los temas que abordamos, que se cuestionen si están o no de acuerdo con lo que las normas señalan o con aquello que se decide en la solución de casos. Y es que se necesita de ciudadanos(as) con mirada crítica y con capacidad para proponer soluciones creativas a los complejos problemas ambientales de nuestro país.
A su vez, y como no hay quien lo sepa todo, en el desarrollo del curso hemos tenido la gran oportunidad de recibir a diversos especialistas que nos han ilustrado con sus conocimientos y experiencias en temas de legislación forestal y de fauna silvestre, áreas naturales protegidas, servicios ecosistémicos, paisaje cultural, energías renovables, delitos ambientales, entre otros. Le estoy muy agradecida a todos (as) quienes nos han venido acompañando durante este tiempo para permitirnos abordar estos temas especializados como parte del desarrollo de las clases.
En los últimos años he podido ver que cada vez va aumentando el número de alumnos(as) de la Facultad de Derecho que también se inscriben en el curso. Ello me trae tanto satisfacciones como desafíos, particularmente para asegurar que tanto los (las) estudiantes de Geografía como los (las) estudiantes de Derecho vean reflejada la atención a sus intereses en el desarrollo de las clases.
La virtualización de estos tiempos nos trae nuevos desafíos que incluyen aprender a manejar el sistema, lo cual significa haber cometido algunos errores en el proceso de conocimiento del mismo para lo cual espero la comprensión de los alumnos (as). A su vez, estas épocas nos traen la gran oportunidad de poder acceder a grabaciones de reuniones de Comisiones del Congreso de la República o a seminarios online, lo que constituye material de trabajo de la mayor relevancia para el desarrollo del curso.
Lo que sí se extraña es poder tener el contacto humano propio de una clase presencial y llegar a conocerlos no sólo en voz sino también en imagen. Ello, en todo caso, es una realidad a la que ya nos estamos adaptando.
Una vez más, agradezco a la PUCP por brindarme la gran oportunidad de ser parte de la vida universitaria de quienes se encargarán, en el futuro, de construir un país más ambiental y socialmente responsable y, en esencia, un mejor lugar para vivir.
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Imagen obtenida de https://www.definicion.xyz/2018/07/educacion-ambiental.html
